elenapanzetta photography: 29-M

La reciente reforma laboral ha apostado todo por la competitividad en el mercado globalizado, degenerando una vez más el empleo y despreciando la inversión en educación, cultura, sanidad, investigación, tecnología. Contraproducente e injusta, una vez más. En un país ya oficialmente en recesión y con un paro galopante (alrededor del 23%) una reforma como esta aumenta de manera desmesurada el malestar subyacente general.

La jornada de huelga general del pasado 29 de marzo convocada por los sindicatos ha culminado con manifestaciones multitudinarias en toda España: decenas de miles de personas han marchado en contra no solamente de esta reforma laboral injustamente impuesta, sino también contra los recortes y contra un sistema que a diario ejerce una violencia silenciosa y socava los derechos de los ciudadanos. Personas de todos los sectores y todas las edades han bajado a la calle para dar una visibilidad a su malestar: desempleados, empleados, estudiantes, profesores, niños, jubilados y yayoflautas, taxistas, conductores de autobuses, funcionarios, médicos, asociaciones gays, feministas, colectivos de vecinos, etc..
Desafortunadamente esa misma tarde sobre las 18h intenté pero no conseguí participar a la marcha pacífica convocada por CGT y CNT que estaba llegando desde Paseo de Gracia, ni tampoco a la marcha alternativa convocada por el movimiento 15M, porque cuando intenté acercarme a plaza Catalunya encontré el caos en plaza Urquinaona. Voy a contar lo que vi.
Un despliegue de Mossos digno de una guerra (habrán sido unos 30 hombres armados hasta los dientes) con unas 4 furgonetas aparcadas bloqueaban completamente el acceso a C/ Fontanella (y a plaza Catalunya), supe sucesivamente que el grupo de manifestantes tenía programado pasar por ahí, pero las fuerzas policiales detuvieron la manifestación. El acceso por Ronda Sant Pere también estaba bloqueado pero no conseguí ver que pasaba, solo se veía una columna de humo negro y denso subir hacía el cielo. Nos sobrevolaba un helicóptero de la policía y a mi alrededor la gente observaba la situación preocupada y a ratos echaba a correr. A mi lado un grupo de encapuchados de negro _todos muy musculados, vestidos iguales y uno de ellos incluso con algo parecido a una porra que le sobresalía de la mochila... en fin, con toda la pinta de ser mossos infiltrados_ parecía preparar un ataque y cuando les saqué una foto desde lejos con el teleobjetivo, uno de ellos me vio y empezó a sacarme un montón de fotos con el Iphone, como si quisiera ficharme.
Sucesivamente el aire se hizo tan irrespirable que me tuve que alejar, algunos habían hecho unas hogueras con contenedores de la basura y cualquier otra cosa con la que topaban, hasta unas bicicletas del Bicing. Quería llegar a plaza Catalunya dando la vuelta por arriba, llegando desde Paseo de Gracia, pero un chico me dijo que los policías justamente en Paseo de Gracia, en el medio de la manifestación pacífica, estaban disparando gases lacrimógenos de manera indiscriminada. Increíble.
En pocos minutos el desmadre: una fila de furgonetas policiales pasando a toda velocidad y con las sirenas a todo trapo justo en el medio de plaza Urquinaona, casi se cargaron a gente. A mi lado dos encapuchados lanzando botellas vacías de cerveza a esas mismas furgonetas en marcha. La gente echando a correr asustada.
Esperé un poco más y finalmente desistí e volví caminando hacía casa, con muchas preguntas en la cabeza y con pocas fotos lamentables de lo único que pude ver. Que parece ser también lo único que la prensa vio, dado que al día siguiente los sucesos violentos ocupaban un 90% de las portadas, mientras que la manifestación pacífica y las razones que la desencadenaron pasaron como siempre en segundo plano.
Aquí abajo mi pequeño reportaje: